domingo, 29 de enero de 2012

Solis




“Allá arriba estaba ella, quemando los cielos con su gran envergadura…”

Aquel día nos encontrábamos rasgando el fondo del barril. Después del último asalto no quedo nadie a excepción de los verdes y estos llamados “veteranos” que resultaron ser simplemente pilotos del comercio. También estaban algunos de los que se rehusaron a subir, invadidos por el miedo y el desaliento, aquellos que no tenían razones para seguir luchando. Sombras de su antiguo ser, desgarrados de su antiguo orgullo y avergonzados de su antigua dedicación, nada de eso valía ya. A menudo nos ridiculizaban por ser “malditamente optimistas”, porque intentábamos ver el vaso medio lleno cuando en realidad no existía ni una sola gota de agua en el. Por seguir enviando lo que podíamos allá arriba, por seguir luchando una batalla pérdida, por tener algo de aliento. Muchos de ellos tomaron sus vidas durante el transcurso de esa semana, se debía al lúgubre panorama que se avecinaba frente a nosotros. Tal vez tenían razón, y su desanimo era simplemente evidencia de su cordura.

A pesar de todas las circunstancias ajenas a nuestro control, a pesar de que nuestros propios compañeros nos desalentaban, lo seguíamos haciendo. Nuestro orgullo nos erguía, lo único que no se nos podía quitar. Tal vez la maquina se perdía en el calor de la batalla, pero el piloto siempre regresaba, pidiendo otra para volver, esos eran los “tontos” héroes que hoy en día todavía recordamos con tanta pureza y cariño.

Todavía recuerdo ese perfecto amanecer, fue en algún día del mes de octubre, habíamos perdido el único calendario y nuestro pobre sentido del tiempo no era suficiente. Simplemente ya no nos importaba. El sol se despertó con un brillante rojo, alumbrando el cielo con un hermoso degradado naranja. El viento nos dio como regalo un fragante olor a otoño, incluso algunos de nuestros patrones, los que nos enseñaron a volar, salieron de sus escondites en las copas de los arboles para brindarnos su bendición con una canción. Los que podían maniobrar enseñaban lo que sabían a los voluntarios que quedaban. Era un pequeño grupo de granjeros, hombres de negocios y retoños que no sabían siquiera lo que disparar un arma significaba. Pero había que darles crédito,  eran hombres y mujeres valientes que decidieron salir para proteger lo que amaban y querían con tanto ahínco. Sus  rostros crepusculares se detallaban progresivamente bajo la cada vez más brillante luz del sol. No tuve tiempo de dibujar la escena completa, no tuve tiempo de plasmar esa perfecta imagen.

Sabíamos que una oleada se acercaba, sabíamos que la última vez los mártires les habían causado un gran daño y que tardarían en regresar en sus aparatos infernales, pero no sabíamos que tan pronto regresarían.
Rompieron filas al ver el primer hoyuelo abriéndose en el cielo. Cada uno de ellos tomo posición en su respectiva ave de metal. En nuestro caso, regresamos corriendo al edificio que teníamos por base, cada ave con su piloto y su operador. Los derrotados entraron caminando y se quedaron en el antiguo salón principal, se ahogaron en alcohol y cigarrillos.

-          - Es enfermizo verlos así, hubiesen podido siquiera darnos una mano con los que enviamos allá arriba, su experiencia hubiera servido de algo ¿No crees?

-         -  No, ese grupo de maricas les hubiesen destruido el ánimo. Lo último que necesitamos es que su grupo se haga más grande

-          - Lo que necesitamos es un Deus ex machina, compañera
-          - ¿Desu qué?

-          - Una salvación de último minuto en palabras sencillas

-          - Palabra hermano, palabra

La sala de control se lleno por completo en un santiamén. Éramos unos 50 operadores, nuestro trabajo era ser sus niñeras.  Ellos necesitaban tiempo para sentir el ave, nosotros nos encargamos de que su tarea fuese más sencilla, probo ser mucho más difícil de lo que parecía. Intentamos ayudarlos como pudimos, pero para algunos pocos, gracias al cielo, fue en vano. Antes de despegar completamente, 4 de ellos estrellaron. Nuestra tonta esperanza residía en 46 pilotos que apenas aprendían a volar. Ya a lo lejos comenzaban a verse las explosiones y los cada vez más frecuentes hoyuelos, abriéndose en la lejanía. Los titubeantes pero decididos pilotos partieron hacia ese lugar. Haciendo oraciones, rindiendo plegarias, musitando a un ser superior, poniendo su fe en algo supremo, un Dios o un sentimiento. A ellos se aferraron, y con valía partieron hacia el este, al lugar de su probable muerte, fueron allá para ser dignos de ella.

Contra todo pronóstico, los pilotos probaron ser buenos estudiantes. A algunos les costaba mantener al pájaro estable, pero progresivamente iban mejorando. Nuestro mayor miedo se encontraba en ese fatídico momento  en el cual las narices de los contendientes se encontraran. Que aprendieran a maniobrar era un gran logro, pero ni siquiera se acercaba a la proeza que tendrían que realizar. Nuestra fe y sueños estaban depositados en ese acto, pero tal vez era mucho pedir. Cada vez estaban más cerca, y nuestro corazón latía cada vez más rápido y fuerte

-          - Aquí Base Control, Operadora 21, Call sign “Pixie”. ¿Scarface 01 me oyes?

-          - Alto y claro Pixie, una pregunta sincera, ¿Puedo cambiar de nombre?

-          - ¿No te gusta Scarface?

-          - Es de mal augurio

-          - Tal vez tengas razón, ¿Qué tienes en mente?

-          - ¿Qué tal Razgriz?

-          - Suena bien, Razgriz 01

Los operadores hacían lo mejor que podían para mantener altas las esperanzas de los pilotos. Antes de poder darse cuenta, ya habían caído dos bajo el fuego abrasador  de las torretas de una de las grandes maquinas que trajeron de su Tierra.

-          - ¡Abran bien sus ojos, fuego a las 11!

El viejo gritaba órdenes desde su silla, pilotos y operadores hacían lo que podían para seguir sus instrucciones.

-         -  ¡No tengan miedo de estrellar, concéntrense en esquivar y contra atacar el fuego, están demasiado arriba como para preocuparse del piso!

Los verdes se unieron a los otros pilotos que ya se encontraban allí. No fueron la caballería salvadora, pero aliviaron la carga que traían los que llevaban luchando desde antes del alba.

-          - ¡Espada 01, ¿Qué haces?, no te atrevas a dejar el espacio aéreo!

-          - No lo pienso hacer

-          - ¡Tu trayectoria dice otra cosa, no quiero cobardes allá arriba!

Uno de mis compañeros se acerca y toma suavemente por el hombro al operador

-         -  No seas duro con el Josef, es solo un chico

-         -  No quiero que tenga miedo

-          - El miedo lo hará fuerte, acentuara sus sentidos, solo tiene que sobreponerse a él. Y eso ya lo hizo al subir allá arriba y mantenerse allá adentro. Solo tenle algo de fe.

Un breve momento de silencio inunda la habitación.

-          - ¿Espada 01?

-          - ¿Si señor?

-          - ¡Solo demuéstrale a esos desgraciados lo que vales!

-          - Por supuesto

No puedo culpar al chico o a su operador, el panorama no era muy bonito.
La batalla se prolongo por horas y horas. Perdí el contacto con mi piloto por un golpe en el fuselaje que recibió del metal que caía constantemente. Los verdes hicieron lo que pudieron, aguantaron lo que pudieron, se mantuvieron firmes ante esos grandes colosos y a sus millares de esbirros. Pero era evidente desde un principio que no podían ganar. De los 50 valientes que enviamos al cielo con nuestra bendición, solo quedaban unos 4 o 5. Eventualmente las comunicaciones cayeron completamente, y el calor de la contienda se sentía cada vez más cerca, los dimos por perdidos. Estar allá dentro era una pérdida de tiempo, decidimos salir a la pista y observar el espectáculo. Los derrotados se nos unieron, compartimos los pocos cigarrillos y alcohol que quedaban. Volteamos nuestras cabezas y admiramos el atardecer.

-         -  ¿No es hermoso Pixie?

-          - Por favor hermano, dime Artie

-          - Oye, ¿Recuerdas a Kansas?

-          - ¿La banda?

-          - Si claro

-          - Viejo, ellos son un clásico, imposible no conocerlos

-          - Oye

-          - Dime

-          - ¿Tienes miedo?

-          - Nah, solo disfruto de la vista

-          - Yo también, creo que todos tienen esa misma idea en la cabeza. Oye

-          - Dime – Una sonrisa se asoma por mi rostro

-          - ¿Recuerdas Carry On?

-          - Carry on my wayward son, for there'll be peace when you are done, Lay your weary head to rest, don’t you cry no more.

Y allí estábamos todos, sentados en la pista cantando al unísono una canción más antigua que el más viejo de nosotros. Cuando nos acercábamos al solo cantado a cappella por el buen Marcos, sentimos una explosión muy cercana a nosotros, justo tras nuestras espaldas. Todavía estaba uno de nuestra base allá arriba. Dando todo de sí, esquivando el fuego, danzando un tango mortal. Los restos de los aparatos comenzaban a caer alrededor nuestro. No nos importo mucho, el espectáculo era demasiado maravilloso como para preocuparse por nuestra inminente muerte.

-          - ¿Cuánto tiempo llevamos en esto?

-          - Mucho, se va a quedar sin combustible y sin municiones prontamente, ya debe estar sin misiles.

-          - ¿Quién crees que sea?

-          - No puedo ver desde aquí, ¡Oye viejo, ¿Todavía tienes los binoculares?!

-          - ¡Atrápalos!

Las voces chocaban entre sí, todos se preguntaban que piloto pudiese haber resistido tanto tiempo en ese infierno. Era uno de los modelos antiguos, un pequeño Gyr-Falcon

-          - ¡Es un Gyr-Falcon!, ¿Quiénes tienen Gyr-Falcon’s aquí?, Barry creo que solo el tuyo y el mío usan el Gyr-Falcon

-          - El mío cayo alrededor de las 10 de la mañana

-          - ¡Entonces es el mío, es Razgriz!

-          - ¿No se llamaba Scarface?

-          - ¡Sí, pero que importa, está vivo!

-          - Rompe su gran culo mecánico, chico

Lo que veíamos cuando estábamos adentro eran gráficos en un ordenador, adentro no hubiésemos podido ver en realidad que tan bueno era el chico. Definitivamente había aprendido rápido. Sus movimientos eran rápidos como el relámpago, agiles y flexibles como el agua, briosos como el fuego. ¿Quién diría que tales cosas eran posibles en un avión tan pequeño?

-          - Parece que solo queda el

-          - ¿Crees que nos hayan visto ya?

-          - Sí, pero nosotros somos el menor de sus problemas. Parece que acaba de cargarse a un coloso el solo con el último de sus misiles.

-          - ¡Bien hecho!

Puedo imaginar su rostro cuando se dio cuenta que el gatillo de la Vulcan comenzaba a hacer clic. Solo estaba el con sus perfectamente contadas dos decenas de perseguidores. Hizo lo que mejor se le ocurrió, usar  su entorno. Se lanzo en picada, alcanzo los restos que caían, los uso de protección, algunos cayeron encima de sus perseguidores, se escucharon cinco Bangs. Voló increíblemente bajo, su pecho casi rozaba el piso, ellos rasparon su vientre, tropezaron y cayeron. Intento volver a subir mientras esquivaba el fuego. Las reacciones del chico, de Razgriz, eran demasiado rápidas, sus contendientes se quedaban atrás constantemente y por eso chocaban, tal vez ellos estaban en la misma situación de nosotros, sacando lo último del barril. ¿Pero porque ponerse en una situación tan desesperada?, tal vez era una cuestión de orgullo, justo como nosotros. Nos subestimamos mutuamente.

-          - ¿Qué hacemos aquí parados como unos estúpidos viendo?, ¡Ayudemos un poco al chico!

-          - ¡Usen la artillería antiaérea, no importa que no estén a nuestro alcance aun, solo hagan ruido, comprémosle tiempo!

Cada uno tomo posiciones nuevamente y dispararon con todo lo que tenían.

-          - ¡Cuidado y le dan accidentalmente!

El chico comenzó a perder altitud y sus perseguidores aun le seguían de cerca. Se dispuso a aterrizar en la pista en medio del fuego. Los derrotados corrieron a limpiar la pista de aterrizaje lo mejor que pudieron, tal vez habían entrado un poco en sus cabales.

-          - ¡Alto el fuego o le darán!

El chico estaba justo entre nuestro fuego y el de ellos, hacia lo mejor que podía para esquivar. Al ver que dejamos de atacar, uso las luces de su ave para enviarnos un mensaje.

-          - ¿Eso es morse?, ¡¿Qué dice?!

-         -  D-I-S-P-A-R-E-N-.

-          - ¡Ya lo oyeron!

Cuando estuvo a punto de aterrizar los que le perseguían viraron y se desplegaron llenos de terror, regresando a los colosos que les quedaban. Finalmente aterrizo, su ave despedía vapores por todas partes, no estaba dañada, solo caliente.

-          - Chico, lo hiciste

Lo recibimos con ovaciones y alegría, nosotros no ganamos la guerra, pero sobrevivir es una gran victoria. Abrimos la cabina y lo arrebatamos de su refugio. Lo teníamos flotando en un mar de brazos, no nos dimos cuenta de que a duras penas se movía, estaba exhausto.

-          - Necesito un vaso con agua

-          - Tráiganle al chico agua

Cuando Josef giro y corrió al edificio en busca de agua, escuchamos su abrupta parada.

-          - ¿Qué cojones…?

Hubo un increíble estruendo justo encima de nosotros, no podíamos escucharnos y por un momento el sol se oscureció. Vi a Jess intentando decirme algo con asombro, apenas pude comprender todo lo que dijo, pero entendí perfectamente las palabras Deus Ex mientras sostenía su pálido rostro con estupefacción. Yo asenté con mi cabeza invadida por la extrañeza. El estruendo comenzó a mermar y el somnoliento sol comenzó a asomarse nuevamente

-          - Bah, después de hoy ya nada me sorprende

-          - Salen de hoyuelos como ellos, pero sus maquinas y colores son diferentes

-          - No creo que sean de la misma tierra, los desgraciados están corriendo despavoridos

-          - El escudo de armas dice “Solis Occasus”

Era una bestia enorme, de una anchura de casi un kilometro, y unos 400 metros de largo. El chico recupero su aliento, se puso de pie y miro al cielo.

-          - Yo no sé que sean, no sé si ambos pelean por nuestro lugar, les daré el beneficio de la duda a los nuevos. Solo llenen el tanque y cárguenla de munición, subiré nuevamente.

-          - Tranquilo chico, no tienes porque, ya terminamos por hoy.

-          - No, esto termina cuando los bastardos se vallan completamente.

-          - Que alguien le traiga el agua, los demás ayúdenme a cargar su avión.

Cargamos el avión lo más rápido posible. En la lejanía se veían aun a los bastardos tratando de escapar. Esperando a que sus baterías se cargaran completamente para poder regresar por los hoyuelos que entraron, allá arriba en los cielos. Antes que el chico subiera nuevamente le agarre por el hombro y le dije “Se digno”. El simplemente sonrió y se puso el casco. Despego nuevamente, volando ala con ala, junto al nuevo bando que entraba al tablero, acabando con los rezagados y heridos. Ya el sol se había ocultado, sin embargo había luz. Allá arriba estaba ella quemando los cielos con su gran envergadura, y a su lado estaba él, como estrella que se niega a dejarse opacar por un sol más cercano.

sábado, 28 de enero de 2012

Yo vivo mi vida al limite, ¿Y tu?



La vida es aburrida. No hay zombies, ninjas, extraterrestres, dioses, piratas y mucho menos dioses extraterrestres piratas de Yami. Por lo general la única manera mantener la cordura en este mundo tan extremadamente plano, predecible y circunstancialmente molesto, es el escape al mundo de la imaginación, donde puedes realizar todas estas payasadas a gusto y placer. 

De manera mas concreta, podría decirse que este escape son los libros, música, películas y videojuegos. Pero a diferencia de las demás personas, yo poseo otro medio mas que me permite entretenerme sin acudir a los anteriores. La gente normal le dice Facebook, yo me refiero a el como "El Pabellon de los Retrasados"

No suelo usar Facebook a menudo. De vez en cuando es solo para realizar citas y encuentros. La mayoría de mis "Amigos" (=3), son excompañeros de secundaria, compañeros de Universidad y gente completamente random. 

Coño, no quiero cojer contigo
pinche rusa.

Como es evidente, nunca hablaría con ellos en condiciones normales, porque los desprecio. No es nada personal, tengo que mantener mi indice de odio en un 80% de la gente que conozco. Sin embargo, hay un selecto grupo de joyitas que son el objeto de mi entretenimiento continuo. Creo que podría considerarse como "trolear", pero yo lo veo mas como un acuerdo mutuo:

Ellos Pueden Decir Estupideces, me rió de ellos y a cambio los dejo Vivir

Un poco tonto e infantil, pero creo que todos deberían de hacerlo. Decirle a alguien estúpido en la cara o, no es mi culpa que te hallas dejado preñar, es una actividad que refuerza el auto estima y destruye el de las personas que probablemente lo necesitan. Desde la perra que hace caras de pato para las fotos y el retrasado de retrasados comentarios. Búrlate de ellos, adelante, hará tu vida mas feliz, ellos se molestaran, te borraran del Pabellon y continuaran con sus vidas, se olvidaran y tu seguirás con una sonrisa en tu rostro, todos felices

Ahora bien, esta es una manera de hacerlo, a lo radical hardcore. También puedes ser sutil y mantener tu pequeño grupo selecto sin que hullan enfurecidos. 

INFINITE LULZ
Ejemplos:


Ahora si, en serio, jodan la vida pero no se pasen de culeros. Toda esta entrada fue una completa pelotudez. Relleno para el mes de enero ._.