martes, 27 de septiembre de 2011

El Héroe es un Cobarde


Habia pasado tiempo desde que realizaba una entrada. Disculpa si te tengo algo olvidado, pero es que he tenido otras obligaciones y distracciones ociosas que me han alejado. Agrégale el hecho de que no tenia ninguna idea, sobre que contarte en la semana que te mantuviera ligeramente entretenido. Recordé que tenia un viejo proyecto que comencé con un cercano amigo mio, el actualizo su blog con una versión terminada de su trabajo, y me motivo a terminar el mio y acoplarlo a su final, gracias. Esta es la entrada de la semana, "El Héroe es un cobarde", es algo extenso para un blog. Por cierto, si eres de los hijos de puta que roban contenido ajeno, deberías sentirte avergonzado por ser un fracaso como escritor y tengas que rebajarte a robar algo tan malo como esto. Tal vez yo sea pésimo en esto, pero al menos mantengo mi orgullo y honor. ¡Disfrútalo! 

CAPITULO 1

-Hu, hm, hm hm hm hm, necesito recuperar mi aliento.

“Corre, Andrés, Corre” es lo único que se me ocurre para este momento, después que ocurrió toda esta mierda es lo único en lo que he pensado, sobrevivir. Estoy seguro que el darwinismo social nunca pensó en “la supervivencia del más cobarde”, si del que mas corriera se tratara, aparentemente yo sería el ganador.
Han pasado ya más de 3 días y la única conclusión a la que he llegado sobre la gente en medio de una catástrofe es que…

-Mierda,  no otra vez.

Un pequeño grupo se mueve tambaleante en mi dirección, más vale seguir hablando en voz baja y correr al lugar “seguro” más oscuro posible. Toca seguir corriendo. Como leí en algún libro que no recuerdo, “ya no existen lugares seguros, solo existen más seguros”. Tengo ganas de vomitar, es la 3° vez en el día y no he comido bien, dentro de poco desmallare. Necesito sentarme, acostarme, intentar descansar, pero no, primero debo encontrar a mi “oscuro más seguro” y después si lo intentare.

A lo lejos hay un vecindario, mi búsqueda de “algo” en el centro de la ciudad ha sido tan exitosa como los intentos de una gallina para volar. Hay decenas de casas, no habrá problema en escoger una. Aparentemente esa decisión depende de dos variables, ¿está oscuro? Y ¿Hay  adentro alguien o algo? Por un momento mi sentido común se apago, un gran error, entre a la primera casa que vi. Era una casa de dos plantas, en realidad era una, pero sigo pensando en dos, tenía los vestigios de la esperanza de país tercermundista, los ladrillos y varillas puestas en el techo de la primera planta, una de las pocas cosas que respeto de la gente de mi país. Aspiro que esta esperanza inherente a la gente que aun vive en este país, o siquiera la ciudad, se mantenga.

Mientras me adentro casi cayendo del cansancio, noto la simplicidad del hogar, una terraza amplia, dos macetas tiradas en el suelo, normalmente las alzaría pero no me puede valer menos en este momento, la sala evidencia un ambiente familiar que creo que es único de la costa, el sofá frente al tv con una mesita entre los dos, una mesa más pequeña al lado del sofá, una mesa de comedor al fondo y justo al lado de la mesa de comedor…

-Maldita sea, espero y estés disfrutando esto Dios

Los cadáveres de una familia entera, 3 de ellos con un orificio en la frente. No le daré cabeza a esto, estoy demasiado exhausto si quiera para pensar, es tarde, me siento en el sofá.
-Tres, dos, u…

Mi cabeza cae, mi cuerpo retumba y caigo muerto del sueño en el sofá. Es extraño como las condiciones del cuerpo le permiten a uno ignorar por completo factores externos como el trauma que le causa a uno ver una familia completa masacrada por otros y entre ellos mismos, quizás para morir de una manera digna, y también de la increíble peste que despiden puesto que deben llevar 36 horas muertos.

-Ya es medio día

Debí haber dormido más de 20 horas, ahora que lo pienso estoy en medio de la escena de una masacre, regreso a la realidad, y después de un frenesí adrenalistico de carrera y cobardía he recordado que tengo familia. Mi pulso se acelera, mis pupilas se dilatan, me cuesta respirar…

-Deben estar bien, por muy inútil que haya resultado el ejército para contener, eso no implica que realizaran una buena tarea de extracción y rescate, les doy puntos por eso, espero haya sido así

Una vez más estoy en calma, una calma relativa, pero es algo. Ahora que estoy descansado puedo restablecer mis prioridades. Me siento “más seguro”,  estoy desarmado, desfallezco del hambre, necesito prendas nuevas, tengo sed. Estoy casi seguro que iría como algo así:

1.      Comida y agua, churrasco argentino y una coca cola bien fría
2.      Arma, preferiría no usarla
3.      Ropa, algo ligero pero resistente

-Coño, me encantaría comer un churrasco argentino ahora mismo…

Me dirijo a la cocina y atravieso los cadáveres, tal vez comer carne no sea tan buena idea, la nevera no tiene luz, la carne se perdió, hay dos latas de atún, unas tres manzanas, un racimo de apio y una pequeña bolsa con espaguetis. Prepararía los espaguetis pero tengo miedo que el olor atraiga algo, me limitare a comer lo que me queda. No estoy del todo satisfecho pero es algo

-Hmmmm

Algo interrumpe mi momento especial. Miel y ambrosia no fueron completamente degustadas como deberían ser, ese no fui yo, mierda, mejor me escondo en el desván, sonó demasiado cerca como para poder correr.

Han pasado ya tres horas dentro del desván, y cada vez más me avergüenzo de mi mismo, desde los 15 años pensaba en lo que haría en una situación así y cuando me preguntaban siempre respondía con orgullo. Quisiera poder experimentar ese orgullo de nuevo. Aunque esas 3 horas no fueron desperdiciadas, fueron 3 horas de sueño, descanso que se aprovecho, tal vez fue la sensación de éxtasis luego de comer algo. Por fin recojo el valor suficiente como para salir del desván, no hay nada afuera. Puedo darme por servido, he comido algo y tengo fuerzas para buscar a alguien o algo útil. No me gusta este estilo de vida que estoy desarrollando, viviendo de la carroña, de las sobras, de lo que encuentro, me pregunto cómo haría la gente que vive del estado, con programas como “Familias en acción” y cosas por el estilo. Lo único bueno que tengo en este estilo de supervivencia es que por suerte, he evitado la confrontación al máximo, y tengo suficiente tiempo para pensar en cómo no quedar loco, razones por las cuales actuó, justificando cada acción que tomo. Para mi desgracia siempre hay algo que me dice que estoy obrando mal, a lo que hay otro algo que me recuerda al darwinismo social.

Saliendo de la casa, vuelvo a ver la escena del crimen, esta vez con más detalle para encontrar aquello que es capaz de hacer un agujero uniforme en una frente. Ya me acostumbre a la presencia de sus miradas al vacio, es triste pero es lo único que puedo hacer. Me agacho y encuentro algo en las manos del padre.

-Enhorabuena, ¿Pero qué cojones...?

Para mi desgracia el arma no tiene balas, pero al menos es un arma, una Walther PPK. Aunque no tiene balas, esta familia ha hecho mucho por mí. En medio de su muerte, me brindaron un techo, esperanza, alimento y consuelo. Voy a uno de los cuartos, tomo una sabana, regreso a la sala, cierro sus ojos y pongo la sabana encima de ellos, es lo máximo que puedo hacer. Con suaves pasos, como los de un monje saliendo de un lugar sagrado, me dirijo a la salida.

-Gracias

CAPITULO 2

Al salir de la casa comienzo a enfundar el arma bajo el cinturón de mi jean, no tengo un suéter, por esta razón tengo que conseguir ropa. Antes de terminar de guardar el “inútil” arma, recuerdo algo muy importante sobre ella

-Mi nombre es Bond, James Bond

Y decían que ver muchas películas no traía nada bueno, a la larga este momento cómico me ha evitado el pensar demasiado en la tragedia de la familia que estoy dejando atrás. A lo mejor regresare al centro y veré que encuentro, tal vez comida enlatada, un suéter o a lo mejor balas.
Es gracioso, ese recuerdo de James Bond me ha mantenido tarareando “The World is not enough” de Garbage, tanto así que perdí la noción del tiempo y el espacio en este corto pero arriesgado viaje, es un lujo que no me puedo permitir. Una de las lecciones que aprendes tras una vida de libros, películas y videojuegos, es que los lugares generalmente atestados de gente, como los centros comerciales, no son muy buenos durante un evento como este, pero desgraciadamente en él hay tiendas deportivas, almacenes con comida, y tal vez un guardia o un policía muerto con municiones. No me queda otra sino entrar

-I know how to hurt, I know how to kill, I know what to show, and what to conceal, I know when to talk, and I know when to touch, no one ever die from wanting to much, TUN TUN TUN TUN, the world is not enough, but it is such a perfect place to start, my love, and if you’re strong enough, together we can take the world apart…

Mejor dejo de cantar que la cago, mejor canto en voz baja.

-Un regalito del divino baby

Un bate de aluminio, tirado en toda la entrada, que conveniente, pareciera que el destino quiere que yo conozca la mierda que se me viene encima, si tan solo el supiera que no tengo la más mínima intención de pelear. No es por cobardía, es perfectamente razonable, soy escuálido, delgado, sin fuerzas, no haría ningún daño con este bate, lo único que tengo es un buen corazón, y me refiero al órgano, y piernas decentes. De igual forma lo tomare, al menos puedo aventarlo para hacer tropezar a mis perseguidores.

El centro comercial es inmenso, hacia años ya que no pasaba por aquí, la última vez que estuve por aquí tenia tal vez unos 8 años, lo curioso es que esta solo y completamente muerto, en el buen sentido de la palabra. Coño esta mierda es tan grande que podría echarme un pedo y sonaría por todo el lugar, es más, ¿Debería?

-Convoco a los poderes oscuros de Shub Niggurat, de las profundidades de R’yleh, el vigoroso Cthulhu, las fuerzas del inframundo me acompañan… DAME TU FUERZA GOATSE…

*Pfft

-Esperaba algo más… poderoso

Debería dejar las estupideces, por un lado fue bueno que no sonara, pero me decepciona que no fuera al menos algo ligeramente sonoro.

-Soy un inútil

Dejando atrás mí momento infantil, el segundo que me permito en el día, encuentro una tienda de ropa, afuera yace un hombre muerto en el suelo, en sus treinta y tantos, buen estado físico, tiene el rostro de un hombre de familia a pesar de su relativa juventud, una argolla de matrimonio en su mano confirma que está casado

-¿Qué habrá sido de ella?

Más adelante hay una mujer boca abajo, pareciera que intentara alcanzar al hombre, hay uno de ellos no muerto-muerto encima de sus piernas, tiene 6 balas en el cráneo. La mujer tiene el arma en su mano.

-Tal vez era su esposo, murió tratando de llegar hacia él, tal vez quería morir a su lado

Linda y triste historia, como la primera película de “La tierra antes del tiempo”. Te culpo Pie pequeño por ser el precursor de una generación emo. El arma está vacía, es un revolver, no me interesa nada más, mejor lo dejo allí y me voy de compras. Me quedo con el suéter manga larga con líneas grises horizontales y como hace frio, lo cual es muy raro, me quedo con el anorak naranja.

-Hay algo sobre los anoraks naranjas, tiene que ver con caricaturas y mala suerte…

* 3 segundos después

-Me vale cojones

Ya cuando voy a salir tropiezo una escoba, esta cae y escucho un gruñido…

-Oh mierda

La mejor opción son los vestiers. Mi agilidad para esquivar cosas a veces me sorprende, soy un completo inútil cuando tengo el control, pero cuando estoy en riesgo, pareciera que mi propio cuerpo sabe exactamente qué hacer, movimientos con una precisión felina, sorteando obstáculos como negro escapando de turba furiosa.

-¿Papi eres tú?

Ese no fui yo…

-¿Mami?

¿Es un niño?, no pienses, solo aléjate del peligro y después preocúpate por lo que viene luego, olvida la planificación, lo que tienes es el ahora. Sigue corriendo hasta los vestiers, no puedo creer que estén tan lejos

-No me asusten así, llevamos jugando al escondite por horas, ya tengo miedo y quiero irme a casa - Es una niña y parece estar en el vestier, supongo que compartiré el juego y el escondite. En el pasillo de los cubículos hay una pequeña niña asomada

-Shhhhhh, haz silencio que nos encontraran

-¿Quién eres?

-Me llamo Andrés, también juego al escondite, encontré a tus padres y me pidieron que jugara contigo

-¿De veras? ¡Qué bien!

-Ok pero haz silencio que nos encontraran

Era una pequeña niña de no más de 6 o 7 años, su cabello era de color rubio, casi resplandeciente, no serviría de mucho esconderse en la oscuridad con un cabello tan brillante. Usaba un pequeño Jumper, zapatos deportivos y un pequeño reloj de Hello Kitty

-No creía que todavía hicieran esas cosas

-¿Qué dices?

-Disculpa cariño, no decía nada

-Si tu lo dices- La niña me miro con unos grandes ojos azules- Oye quieres ver mi ¿súper escondite?

-¿No es este?

-No, está más adelante

La niña tomo mi mano y me llevo a un cubículo que estaba más adelante, abrió la puerta y me mostro un mini cuarto acomodado para ella, había comida, una pequeña colcha en el piso y una muñeca de trapo en una silla.

-Mis papas lo acomodaron para que me escondiera de la gente rara que camina feo, me traían comida a menudo, mi mama siempre estaba conmigo porque mi papa decía que tenía que trabajar en la tienda como policía porque no quería que los raros entraran a robar ropa, robar está mal ¿Sabias?. Después mi mama se preocupo porque mi papa no llegaba de su turno, aunque el siempre llega tarde a la casa, pero mi mama me dice que íbamos a quedarnos un rato aquí porque tenía miedo de salir de la tienda y que esta sería nuestra casa. En fin mi papa…

-¿Podrías hablar en voz baja?

- Oh si, en la escuela me dicen eso a menudo, te decía que mi papa no llegaba y que mi mama se preocupo y me pidió que me quedara aquí y que jugara al escondite y que no me dejara encontrar por nadie, hace mucho tiempo que mami no regresa

Si tan solo supiera lo que hay allá afuera, esta niña es ignorante de todo, debe ser algún tipo de bendición.

-¿Que fue eso?- La niña exclama con la voz quebrada al oír un gruñido, el mismo que había escuchado antes- Por favor diosito que no sea uno de los raros

-Tranquila niña, yo estoy aquí, ¿Cómo te llamas?

-María Carolina, pero mi mami me dice Caro

-Ok Caro, tu tranquilita y no hagas ningún ruido, mientras nos quedemos calladitos no nos pasara nada yo me quedo contigo

*Media hora después

- Tengo ganas de orinar, quiero hacer pipi

-No es seguro Caro, ese raro allá afuera sigue rondando, esperemos un rato más

-Papa me hubiera dejado ir

-Estoy seguro que si cariño, pero papa no está y soy responsable por tu integridad

-¿Qué es intigridad?

-Mas luego te explico

-Tengo hambre

-Espera a que se valla el raro y buscaremos comida

-¡Tengo hambre!

-¡Shhhh!, que nos encontrara el raro, recuerda lo que dijo tu papi y tu mami, estamos jugando al escondite

-¡Ya no quiero jugar más, me voy!

La niña se para y sale del cubículo, hacia el pasillo y al almacén de ropa

-Oh mierda, me cago en la virgen

Detesto esta sensación de deber que inunda mi cuerpo y mi mente, lo más probable es que me maten por idiota y esa pobre estúpida seguirá sin saber que carajos pasa. Al menos tengo algo con que protegerme. Salgo del pasillo, me pongo el anorak, la capucha, empuño el bate. La niña contempla el cadáver de sus padres, mientras algo la contempla a ella.

-Caro, cariño, el raro te mira feo, ponte tras de mí y hablaremos luego de lo que estás viendo, y que probablemente te dejara secuelas por siempre

Por tres segundos la niña ni se inmuta

-Ya voy

El “raro” nos mira fijamente, por suerte está solo.

-I KNOW HOW TO HURT- Primer swing, le pega en la costilla

- I KNOW HOW TO KILL, I KNOW WHAT TO SHOW, AND WHAT TO CONCEAL- Un golpe al estomago y a la barbilla con el bate

- I KNOW WHEN TO TALK, AND I KNOW WHEN TO TOUCH- Espere demasiado a ver si caía, el raro arremete contra mí, pero solo pienso en la niña

- ¡CARO QUITATE DE AQUÍ!- le pego un empujón casi inhumano pero que la aleja del peligro

Furia animal se ve en sus grisáceos ojos, esto no es humano, no es animal, tal vez la niña no estaba mal del todo en su infantil nombre, solo se les entiende como raros. En medio de su embestida me doy cuenta que el bate se está doblando, un último golpe y se rompe esta mierda, esos golpes que pegue, no fueron nada inteligentes, ¿una costilla rota?, es inútil no siente dolor, ¿Al estomago y barbilla?, puede que retumbe y caiga, pero se volverá a parar, solo una clase de golpe puede acabar con esto…

-THE WORLD IS NOT ENOUGH

¿Has visto una bola de beisbol ser golpeada en cámara lenta?, yo no, pero tengo una idea de cómo podría ser

-WOOOO, boom HEADSHOT

-Vendrán más raros si sigues gritando

CAPITULO 3

Después de un frenesí viene la completa calma, ¿pero es esta calma realmente tranquila?

Dos miradas en blanco se interconectan, la niña tiene que dejar de ver esto. Una joyería cercana y “más segura” se convierte en el recipiente de algunas lágrimas.

-Tranquila, todo va a estar bien- Estúpidas palabras de un hombre estúpido, ¿Cómo se me ocurre decirle que todo va a estar bien después de ver a sus padres masacrados?

-¡No Mientas!, no va a estar bien, ¡Alguien le hizo daño a mis papás y tu cantabas esa boba canción!- No la culpo

- Lo siento, si no lo hacía seguro nos hacían daño-

-¿Cantar?

-Si seguro, cantar me ayuda a concentrarme, me hace sentir mejor, ¿no hay canciones que te gusten?-

- No creo que pueda recordar canciones ahora, mama cantaba para mí-

- Lo siento Caro, no pude defender a tus padres, no los pude ayudar-

-¿Tú tienes la culpa de esto?-

-No cariño, no la tengo, pero si hubiera llegado más rápido, tal vez hubiese podido hacer algo-

Si no me la hubiese pasado de escondite en escondite, corriendo de un lado a otro. Tal vez si hubiese conseguido un grupo de gente, la hubiese armado con bates, recogiendo cuanto se pudiere, rescatando, ayudando, o algo, o lo que sea. No debí entrar a este lugar, debí ignorarlo, debí seguir, debí hacer algo diferente, debí morir con ellos, debí quedarme, ¿Por qué carajo corrí?, Ahora esta puta incertidumbre y esta puta tragedia, con este puto cansancio y esta puta niña, ¿Cómo coño he de seguir con un panorama tan desalentador?, ¿Las cosas podrían ponerse peor?, sería mejor así te lo aseguro, así no tendría que pararme de nuevo, así no tendría que actuar ya que las circunstancias serian imposibles. Pero no, el destino decide darme esperanza, esta puta esperanza no me sirve para nada, es vacía, no tiene recompensas, solo sufrimiento. Párate, párate, párate… ¡Coño porque no te paras! Siéntate, acuéstate, espera a que vengan, ¿Para qué luchar si todo está perdido?… Maldición, las ganas de vomitar regresan, habían cesado, pero están regresando nuevamente

-Maldición- Mi rostro sucumbe y se vuelve a la fría y desoladora impotencia- Lo siento, de verdad lo siento-

-No tienes la culpa, ese raro y sus amigos son culpables. Ellos y su rabia, ¿porque tienen tanta rabia?, ¿Por qué le hacen daño a la gente?, ¿Por qué?-

-Oye, oye, oye, cálmate, tranquila, es cierto que las cosas están mal, pero te prometo que de ahora en adelante, no te pasara nada malo-

- ¿Lo prometes?-

- Si-

-¿Lo juras?- La niña se limpia unas lagrimas de la cara

-Lo juro-

-Ok, recuerda esto siempre, me prometes que no permitirás que me pase algo malo- Su rostro denota firmeza en sus palabras, como si se transformara en otra persona de un momento a otro. Los niños son raros, nunca los entendí, nunca los entenderé. La mayoría del tiempo los niños son constantes en sus acciones, actúan como infantes, son predecibles, pero es raro cuando niños tan pequeños resultan tan maduros y ácidamente honestos. Esta niña se adapta a las circunstancias, yo a su edad seguiría llorando… ¿Lo estaría?

-Oye que te parece si busco algo de protección, no nos podemos quedar quietos, ¿Qué tal algunos guantes y rodilleras en alguna de las tiendas deportivas que hay en el almacén? -La niña guarda silencio

-¿Caro?-

 Ni una respuesta, todavía no está dispuesta a irse. Sigue siendo una niña después de todo

-Espérame aquí, ya regreso-

Estoy de vuelta en la tienda, la escena del crimen, tengo que hacer que la niña se mueva, no la puedo abandonar, estaría abandonando mi humanidad y la culpa me mataría. El anillo del padre y la madre están en mis manos mientras regreso cuidadosamente a la joyería.

-Cierra los ojos, por favor no los abras-

Un collar del mostrador de vidrio roto de la joyería, mas los anillos de compromiso de los padres, espero y esto sirva de algo. Sonara algo inhumano pero necesito a la niña moviéndose, esto la hará moverse.

-Ahora ábrelos- pausa mientras los abre- ¿Sabes qué es esto?-

- Es un collar y esos son los anillos de compromiso de mis padres-

- Es tuyo, estoy seguro que lo hubiesen querido así, de esta manera ellos siempre estarán contigo-
No podría decir que con poca emoción, se puso el collar improvisado y me acompaño hasta una tienda deportiva. Se acerca el anochecer, no podemos demorar.

- Toma esas rodilleras y póntelas, y el casco también, asegúralos bien-

Rodilleras, casco de patinaje, guantes de motociclista de esos que dejan las falanges libres y unas grandes pero ligeras botas. Dos bates de aluminio de los grandes, ya tengo uno, pero no creo que aguante dos o tres golpes tan violentos antes de doblarse por completo, y por si las moscas, un rifle de aire, bastante genérico, pero parece un rifle de verdad.

-Agarra ese morral- La niña señala al morral amarillo y grande- No ese no, el de al lado, el verde pequeño, si ese mismo- A decir verdad, estoy cagado del miedo, pero no puedo demostrar miedo, la niña colapsaría.

-Ok, yo tomare ese bolso, es un poco más grande, llevare comida allí, enlatados preferiblemente, espera un momento…-

Hay un guardia de seguridad privada, de esos que transportan dinero, esta horriblemente muerto, rara combinación de palabras, pero creo que es acorde. Está en una habitación muy oscura.

-Quédate atrás, no te acerques y no veas, si grito, corres y corres duro-

-Ok-

Es hora de empuñar el bate de nuevo. El tipo tiene un hueco muy grande en su cabeza, pero no consigo ver lo que busco, esta algo oscuro, estoy convencido de que este tipo se mato o lo mato un compañero, parece haber muerto “en vida”, no tiene mordidas, ni ese característico aroma a putrefacción combinado con arroz chino de dos días, pero ser precavido nunca está de más. Tengo que seguir buscando a ese preciado gusano, espero  no sea un señuelo y yo una miserable carpa a punto de morderlo. No estoy seguro de esto, pero la esperanza de aquel tesoro es tan tentadora que me es imposible dejar de pensar en ella, no solo porque significa un aumento en nuestras posibilidades de vivir, también significa cumplir uno de mis sueños adolescentes, cargar una escopeta. 

En medio de la oscuridad pateo algo que no suena a ropa ni a carne.

-Oh si-

-¿Qué paso?

-Encontré algo que pega más duro que un bate-

-Una Bennelli M4-

-¿Qué es eso?-

-Una Escopeta grande, está llena, excepto por una bala- Este se suicido- Encontré también una cajita con varias balas adentro, tendrá unas 20 o algo así, vallamos a buscar algo de comida- Aunque una ligera sonrisa se ilustra en mi rostro, al bajar por unas escaleras una pregunta inunda mis pensamientos ¿Qué hare después de esto?

-Oye…-

-…..-

-¿Andrés?

CAPITULO 4

Venir al Centro Comercial no fue tan mala idea, a decir verdad, venía dispuesto a morir en este lugar. Venía a encontrar la muerte, pero recibí algo completamente diferente, una razón para vivir, no sé si estoy dispuesto a aceptarla, pero no habría ninguna diferencia entre esos “raros” y yo, si abandonara a la pequeña en este lugar. Sería un ser despreciable, sin humanidad, así como ellos

-¿Para donde vamos?- No tengo la menor idea

- No se Caro, pero no nos podemos quedar en el Centro Comercial otro día mas, cada día vemos más raros caminando por allí cerca las puertas. En unos días podríamos encontrarnos en una situación un tanto peligrosa, mejor prevenir que lamentar-

-¿Pero a donde vamos?-

-En serio que no tengo la menor idea, aunque creo que sería buena idea ir al mar, supongo que estas cosas no podrán nadar, con suerte encontraremos un barco anclado, agarramos comida, provisiones y vivimos allí.

-  ¿Sabes manejar barcos? ¿Y eso será para siempre?-

- No se manejar barcos pero no puede ser tan difícil, además será solo para alejarnos un poco de la orilla, para estar seguros, y creo que estaremos allí hasta que las cosas mejoren – Aunque no creo que puedan mejorar

-¿Cuándo será eso?-

- Espero que pronto, deberíamos empezar a caminar, tenemos que llegar al centro antes de medio día, tendríamos el resto de la tarde para buscar un lugar en el que escondernos para pasar la noche y al día siguiente buscar un barco-

-Tengo sueño, no pude dormir bien por los ruidos-

-Yo tampoco pude dormir bien, las sillas del salón de seguridad no son muy cómodas, mas el sonido de los gruñidos, me sorprende que lograras dormir algo-

Pasar tiempo con la niña me ha obligado a alejarme de mi mismo, ya casi no hablo conmigo, no creo que sea malo o bueno, solo es un cambio. Tal vez es una oportunidad, ¿pero de qué?

El clima no es muy agradable, si estuviésemos en condiciones de normalidad, me encantaría, pero dadas las circunstancias, la lluvia y el frio no nos convienen. Lo que pedí durante toda una vida, un clima más frio, menos calor, pero era mucho pedir un clima antinatural considerando la altura respecto al mar. Dios tuvo que darme esto justo cuando el mundo se fue a la mierda

-Te lo agradezco- Tono sarcástico incluido mientras mira hacia arriba

-¿Qué cosa?-

-Ehm, nada-

Comienzo a sentirme cansado y ella me dice que no me veo muy bien, me pregunta si me siento bien, si estoy cansado, si quiero descansar, ¿agua?, ¿Quieres un poco? Me siento un poco mierda, debo admitirlo. No es fiebre, ni gripa, es solo un cansancio extraño, pero una vez más, no me puedo detener, mas aun cuando tengo a alguien a quien proteger. Hemos caminado durante varias horas, a mi antiguo estilo no hubiese tardado más de dos horas. Pero mi paso era muy diferente al de ahora, antes corría semidesnudo completamente solo y sin cargar maletines, ahora cargo dos maletines, dos bates, una pistola y una escopeta, el rifle se fue al olvido, no era en absoluto práctico, ah, y se me olvidaba hay una niña cansada al lado mío. Mis estimaciones no sirvieron de nada y la noche se acerca. No hemos conseguido un lugar “más seguro”, que la misma calle. Debo admitir, hemos tenido mucha suerte, solo unos pocos que hemos podido esquivar fácilmente, aparentemente hay otra cosa que atrae su atención.

-Estoy cansada, no puedo caminar más-

Me detengo, tomo uno de los maletines y lo pongo al revés, en mi pecho. Me agacho y le digo con un gesto que brinque a mi espalda, que la cargare. Habrá que ver cuánto resisto

-Mi papa me cargaba así todo el tiempo, jugábamos a los vaqueros y el jugaba de caballo, yo era la alguacil y mi mama siempre era la ladrona- Hace una pausa mientras intenta controlar las lagrimas y el llanto porque sabe que no podemos hacer ruido- Yo los extraño, no quiero que se vallan – pero ya se han ido – Mi abuelito y abuelita también deben haberse ido, y mis amigos del colegio también – Ella solloza y el único alivio que tiene son sus silenciosas lagrimas – No te vayas por favor –

- Te juro que no me iré, recuerda que te lo prometí, no importa lo que me pase, no me voy a… BLURRRRGH-

Mi cuerpo se tambalea pero no derrumba mientras vomito lo poco que queda del almuerzo, comienzo a sudar frio, pero no importa, yo estaré bien mientras ella esté bien.

-¡¿Estás bien?!-suspira y se tapa la boca sabiendo que ha hecho demasiado ruido

- Lo estaré-

En la distancia algo explota, ya es de noche y sin el fluido eléctrico, la ya brillante y hermosa noche llena de estrellas, se ilumina aun más.

-¿Qué fue eso?-

-Una explosión muy grande y parece que…-

-¿Está cayendo algo del cielo?-

-Mejor nos ponemos bajo algo-

Miles de pedazos de escombro y gente, si es que se le puede decir a eso “gente”, caen de las estrellas. El dijo “Que de los cielos llueva gente”, y así lo hizo y vio El que era bueno. Yo no lo considero así, pero aun así…

-BLURRRRGH- Otra vez, ya no es el almuerzo, parece bilis color azul, esto no es bueno – No te preocupes, estaré bien

Con esas palabras comienzo a perder la consciencia, mientras mis ojos se cierran veo a la pequeña María Carolina, con sus pequeños ojos azules, mirándome fijamente con sus ojos llenos de lágrimas. Su cabello me recuerda al brillo de la luna y miro hacia arriba tratando de verla, como si algo me esperase allá arriba. Mi mirada regresa a ella y trato de decir algo, pero mis labios no se mueven, quiero decirle, “No importa lo que pase”, aunque en el fondo sepa que eso es una vaga esperanza

-¡No me dejes!, ¡No te vayas!, ¡No mueras!, ¡VIVE!-

Mis ojos se abren y estoy cerca de un callejón recostado sobre los maletines, hay vomito en mi boca y siento que mi pulso es lento y débil. En la entrada del callejón esta ella, apenas podía cargar la escopeta, por eso la apoya en un una silla. ¿Me arrastro hasta acá?, no hay otra explicación posible. Intento ponerme de pie, intento voltear la cabeza y no puedo, intento murmurar, pero no puedo. Veo que ella se asusta, veo que ella se mueve e intenta apuntar. Ella dispara varias veces, se queda sin munición. Se acerca a mí, no ve que tengo los ojos abiertos, y agarra la pistola, dispara varias veces, gesticula triunfo, pero dura poco, mas lejos se ven otros acercándose, son demasiados, un par de decenas. Sigue disparando y se queda seca, sabe que no teníamos mucho, mira al suelo, y regresa a mí. Intento alzar mi brazo para agarrarle y abrazarle, para que no se concentren en ella y vengan por mí. Pero no puedo.

-¡Por favor, Ayuda!-

 Ella agarre el bate y se para enfrente de mí, abre las piernas y se prepara para morir por mí. Lagrimas caen de mis ojos porque veo la valentía de una pequeña. No lo intentes, ¡Hazlo!, ¡Pelea!, ¡No te Rindas!

Esta noche estoy aquí, en frente de un enemigo que no puedo vencer. Percibo al miedo como el mismísimo fuego del infierno arrastrándose por mi espalda. Centellas se ven desde la distancia y sus miradas son comparables como las de la medusa, capaces de inmovilizar a hombres solo con un pequeño vistazo. Pero yo no soy de esos hombres…

-¡Andrés!-

Mi vida término hace tiempo, pero eso no me detiene, hay otras vidas. Con gran furia descenderé mi martillo sobre sus cabezas para proteger lo que atesoro. Si me quitan mi instrumento, mis manos atravesaran sus ojos. Si me quitan los brazos, los pisoteare hasta la muerte. Si me arrebatan las piernas, los morderé hasta que se desangren. Con gran gloria y magnificencia regresare y devolveré lo que tanto han arrebatado ellos. Mi mente se pierde entre las miradas, pero eso no es relevante ahora, hay otro que me mira en la distancia y comienzo a agotar las pocas fuerzas que me quedan. No me puedo detener ahora, debo vivir por los otros.

-¡Ayúdenos!-



jueves, 8 de septiembre de 2011

A' Recomienda 4 obras de literatura Colombiana

A mi me gusta leer, de hecho, me gustan las historias en general, independientemente del formato (Cómics, Teatro, Televisión, Videojuegos, etc), me gusta disfrutar de una buena historia. Siendo colombiano debería apoyar lo nuestro ¿no?, apoyar el trabajo de los compatriotas sin pensarlo demasiado, no lo creo, no soy de los que apoyan lo nuestro por ser simplemente "nuestro", podrías decir que soy un poco antipatriotico o algo así,  incluso creo que seria perfectamente normal que consideraras, que en un futuro sea un pésimo padre. Pero ese no es el punto. He leído algo de literatura de nuestro país y bueno, mi colección no es tan extensa, pero de lo que he leído tengo una pequeña selección de libros que estará siempre en mi corazón, e aquí una muy humilde lista de libros de autores colombianos que me gustaron mucho. Antes de comenzar con la lista me gustaría comentarte que toda historia lleva implícita una meta-historia, y esta siempre te involucra a ti como lector, no solo como observador, contrasta tus vivencias como individuo y en cierto modo es lo que te permite sentir empatia con los personajes y sus circunstancias, no te extrañe que cada recomendación venga con algo mio


Panamá nunca me había sido tan interesante
desde Van Halen
Ilona llega con la lluvia de Alvaro Mutis
A mucha gente le gusta Alvaro Mutis, dicen que después de Gabo, el es el mejor escritor "contemporáneo" que ha tenido Colombia. Estoy parcialmente de acuerdo, el es el segundo mejor, pero Gabo no es el primero, mas adelante comentare algo al respecto. La Mansión de Araucaíma es quizás su novela mas conocida, no es mi favorita, pero he de admitir que la disfrute, fue el primer libro de este tipo que leí, eso me llevo a aventurarme con Álvarito, y eventualmente me tope con este libro, fue bastante conveniente que en grado 10° el profesor de castellano nos pidiera leer el libro como parte del currículo. Todavía es la hora y no me hago entender como es que nadie a excepción mia leyó el libro, mis compañeros decían que el libro era aburrido que los pusieran a leer revistas como "Tu!" y cosas así, y que la evaluación fuera la presentación de uno de los tópicos. La forma de escribir de Alvarito es provocativa y te invita a seguir leyendo, no te aburres ni te cansas fácilmente (aunque estés leyendo en una pantalla de computador). ¿Que vas a encontrar en este libro?:




  • Viejitos teniendo sexo
  • Un prostibulo
  • Un barco quemandose
¿Una descripción bastante pobre no?, lo es, y es a propósito, no soy tan gilipollas como para contarte aspectos claves de la historia. Solo te comento que el libro vale la pena, y es relativamente corto. 

Angelitos Empantanados de Andrés Caicedo
El tipo saco alas de la nada y se saco
el corazón, eso es ser hardcore amigo
Andrés, Andrés, Andresito, Andrés, si no te hubieses suicidado a tan temprana edad, hubieses sido aun mas grande de lo que ya eres. Tal vez era lo que la sociedad quería de ti, el icono del joven escritor rockero y existensialista, al morir les diste tu retrato y ellos te inmortalizaron, ¿Fue bueno?, para ti tal vez no, porque pudiste escribir mas, pero tu imagen joven quedo marcada en nuestras mentes, llenando de esperanza a una generación nueva. Tu sacrificio nos hizo creer que la vida no era solo pueblos de mierda en el norte del país.

¿Alguna vez has leído alguna historia de amor?, supongo que si, yo se que lo hiciste, se que leíste Crepusculo y te llamó la atención, te cautivo, y si eres niña, mojaste tus pantaletas, yo lo hice. Bromeo, y si lo hiciste, deberías sentirte avergonzado. Esta es una historia de amor, amor adolescente el mas meloso, molesto, hormonal, platónico, y tal vez vomitivo que existe, y aun así este tipo (ademas de otros que han tenido éxito haciendolo), logro que una historia de amor adolescente se sintiera tan real, tan dulce y tan trágica al mismo tiempo, aunque yo no la compararía con Romeo y Julieta. 
¿Eres adolescente?, ¿Eres algo racista?, ¿Tienes las hormonas vueltas mierda?, ¿La chica que te gusta es lesbiana?, este libro es para ti

Antes de Continuar
Andrés sos groso, sabelo!

Que se joda el Realismo mágico


Erase una vez el amor pero tuve que matarlo de Efraím Medina

Una portada seca, si quieres busca
 la  verdadera, porque esta no es
¿Sabes quien es raro?, este tipo, Efraím Medina, el es raro, y por eso le gusta a tantos. Su lenguaje es tosco, rudo, soez, bueno, creo que es mejor que les muestre, con el permiso de nuestra excelencia desnuda les compartiré parte del primer párrafo de su obra:


"Me llaman Rep -diminutivo de reptil- desde que recuerdo. Mido seis pies y peso ochenta y un kilos (como los cowboys de Marcial Lafuente Esteganía), tengo ojos negros y hundidos como agujeros de escopeta a punto de disparar, la boca sensual y una verga de 25 centímetros en los días calurosos..."


Aunque su tosco vocabulario es atractivo y para muchos su fuerte (irónico en el mundo de la expresión escrita ¿no?), lo mas delicioso de su obra son las metáforas situacionales que emplea, leer este libro es como hablar con un amigo intimo, el se acerca a ti y te cuenta una historia, no solo es acción o el misterio, romance o drama, presente, pasado o futuro, es la conjunción de todas estas cualidades. Esto fue lo que mas agrado, el rompe con esa brecha espacial que existe entre el que cuenta y el que escucha, el encontró la manera de acercarse y decirte: "Imagínate que al marica del Andrés, le salio lesbiana la vieja". El sabe exactamente como hacer para que te sientas en La ciudad Inmovil, y podría jurar que se refería a Cartagena, tal vez soy demasiado estúpido y por eso no me doy cuenta de que en efecto el se refería a Cartagena 

Por cierto, este tipo tiene la mala costumbre de salir desnudo en sus portadas, ¿no es eso perturbadoramente gracioso?... ¿no?, rayos

Giggity!

Crónica de una muerte anunciada de Gabriel Garcia Marquez

Dejaste a tu hermano morir,
 por eso no me caes bien >: (
No me gusta Gabo, creo que el hombre debe tener algún tipo de fetiche por los pueblos, muchas personas estarán en desacuerdo conmigo, tal vez tu, incluso yo, una vocecita en mi cabeza sigue diciéndome que estoy sesgado y que no se lo que digo, yo simplemente la ignoro. Sin embargo, siempre hay una excepción, me gusta la novela policíaca, y esta novela fue el acercamiento de Gabito a este genero, me gustaron sus personajes, especialmente Santiago Nasar, fue la primera persona, corrijo, el primer cabrón que conocí que reía mientras lo asesinaban, debes tener cojones para hacer eso ¿no?. Te prometo que te vas a reír, porque la gente en este pueblo es increíblemente estupida (nuevamente hay excepciones). Lo mejor del asunto, es que en realidad es así, y no me parecería nada extraño que los eventos narrados aquí por el amigo de la vida de Santiago, hallan sucedido en la vida real o peor, que sucedan en un futuro, porque la gente simplemente no cambia. ¿Porque es importante para mi?, simple, el registro histórico de mi primera erección ocurrio con este libro, un lindo momento que atesorare por siempre. Tiene misterio, comedia, y personajes bastante creíbles, y cabrones, no olvides eso, ¡CABRONES! Ademas, la adaptación cinematografica es buena.

Bueno, supongo que eso es todo, espero que lo hallas disfrutado, y si no te gusto, simplemente comentamelo, adoro revisar Hate Mails, y de hecho los tomo a consideración, incluso los ridículos